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Formación de buceo

La gestión del gas y uso racional del manómetro

Por Sergi Pérez, instructor de buceo.

Si miramos los antecedentes de la mayoría de los sustos, accidentes de buceo recreativo e incluso fatalidades, nos daremos cuenta que en muchos casos, muchos más de los que imaginamos, el origen del problema suele ser la falta de aire.

De hecho, es una de las 6 causas de muerte de buceadores técnicos en cuevas, y entre ellas una de las más comunes junto a la falta de hilo guía.

Pero también tiene relación con la Enfermedad Descompresiva, y es que hay muchas razones por las que se puede sufrir un ataque de presión o embolia por nitrógeno como por ejemplo infinidad de causas «predisponentes» tales como el frío, la deshidratación, perfiles Yo Yo, fumar, fatiga, etc… Pero las causas reales demostrables son básicamente: no planificar la descompresión necesaria, no ser capaces de parar a la cota necesaria y/o, no tener suficiente aire para terminar la parada de descompresión.

Por tanto, si la mala gestión del gas, es una de las principales causas de muertes y accidentes de buceo… Como es que no se enseña desde el principio?

La práctica habitual que se enseña es la de subir a la embarcación con la «reserva» o mal entendidos 50 Bar/500PSI.

Sin embargo este gas (50Bar), no es el suficiente para resolver una emergencia y ascender desde una profundidad superior a los 18m!!!

¡La única emergencia debajo del agua, es no poder respirar!

Es un hecho, y para ello vamos a ver unas recomendaciones lógicas para asegurar nuestro suministro de aire:

Constantes:
– buceo con mi compañero/a de buceo, y por lo tanto, vuelvo con él o ella. El compañero de buceo es mi amigo/a y es mi prioridad.

Variables:

– Los consumos de aire cambian en función del estrés, corrientes, profundidad, etc…
– El entorno exige unas reglas de retorno diferentes: ¿puedo emerger aquí o debo salir por donde he entrado?

Teniendo en cuenta que cada persona es variable, podemos utilizar para el cálculo las siguientes constantes de consumo:

Consumo medio en superficie en reposo: 15l/min.
Consumo medio en superficie en trabajo: 20l/min.
Consumo medio en superficie en estrés: 30l/min.

Observemos el aire necesario para ascender desde una inmersión recreativa habitual en nuestra zona, un buceo muy bonito y atractivo de Cabo de Palos, el pecio del «Naranjito» o «Isla Gomera», que reposa a 40m y su cubierta ronda la media de 33m de profundidad.

La mayoria de las inmersiones en éste pecio son realizadas por buceadores recreativos con botellas de 15 y 12 litros de volumen, y suelen subir a los 50bar, tal y como nos han recomendado en los estándares de buceo tradicional, y parar en -3m durante unos 5 a 10 minutos para un tiempo de fondo de aproximadamente 15 a 20 minutos.

Ahora hagamos el cálculo de lo que necesitaria para un ascenso normal:

Y ahora, que es lo que deberíamos reservar para una resolución de emergencia, la única que se me ocurre: Mi compañero/a se queda sin aire al final de la inmersión, en el peor lugar imaginable, justo antes de iniciar el ascenso, cuando me queda menos aire para compartir.

Manteniendo mi máxima de que la persona más importante en el agua junto a mi es mi compañero/a y, por tanto, quiero y debo, subir con él o ella a superficie, o al menos a una fuente de gas alternativa, debería por seguridad y respeto, conservar en mi botella la cantidad de gas necesario para que compartiendo, ascender de manera segura (realizando la descompresión) hasta la superficie. Que gráficamente queda así:

¡¡Necesito conservar para el ascenso 80 bar de una botella de 15L. o 100 bar de una botella de 12L.!!

Y me pregunto, ¿Cuanta gente lo hace así?

Bajo mi punto de vista, es una falta de respeto no tener aire suficiente para sacar con seguridad a mi compañero/a de una inmersión, y exijo que él o ella tengan ese respeto conmigo, y conserve el aire suficiente para donarme en la peor circunstancia si soy yo el que se queda sin aire por la razón que sea.

7 replies on “El manómetro, mi gran amigo”

Eduardosays:

Hola Sergi
Totalmente de acuerdo contigo.
Recuerdo que hace unos años era práctica habitual dejar una botella a 5m para las emergencias.
No sé si esto es contraproducente porque infunde una falsa seguridad en el buceador o si no se hace por pereza de los barqueros.

Un saludo
Eduardo

Rivemarsays:

En mi opinión es un quita miedos, pero la realidad es que muy pocas veces se utiliza por necesidad, si no por negligencia.

Como bien dices, es el bucedor que «cuenta» con esa botella y deja de ser consciente de las normas de seguridad consumiendo más de lo que debiera. Para que luego, a lo mejor, la botella colgada no sea útil.

En mi experiencia personal, he encontrado botellas perdidas debido al bamboleo del barco, se aflohjó el nudo o mosquetón; botellas vacías, entraron en flujo contínuo; botellas rotas, no se pudieron abrir cuando se requería; y sobre todo, en Cabo de Palos, imposibilidad de mantenerse en cota de deco por la corriente, y es que se convierte en un péndulo.

De llevar una botella para la descompresión, prefiero mil veces portearla yo mismo, porque entonces sé donde está y como. Este verano, partió el cabo de ascenso del «Carbonero», así que los buceadores tuvieron que subir por sus medios a la deriva, como ejemplo.

Rosa Pamiessays:

Ostres tu! Sergi, gràcies per deixar-me compartir aquest punt de vista sobre la gestió del gas. A partir d’ara prometo fer-ho així, encara que d’aquesta manera la immersió se m’escursi una mica, però val més això que, per mala sort meva o del meu company/a, no en pugui fer cap més.
Sergi ets un crack!!!
Petonets
Rosa

Javier Navajassays:

Sergi, me ha gustado mucho tus comentarios
Ademad de que tienes toda la razo.
¿ tienes algo para los que ademas llevamos camara de video?

Rivemarsays:

AHAHAHAHAHAHA, para los que lleváis cámara de vídeo no hay nada 😉 o al menos nada especial o diferente. Por llevar cámara, además de bucear filmas la vida acuática, pero eso no significa que dejes de bucear, de vigilar a tu compañero/a y a hacerlo de manera segura. Jejeje, no es excusa…

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